Delitos Contra El Patrimonio.
Delitos contra el patrimonio protegido por la ley, como el robo, el hurto y la estafa. También se refiere a los delitos de extorsión y de recepción de bienes robados, así como al alzamiento de bienes, la usurpación de títulos y cargos públicos, la difamación, la lesión, la estafa y el enriquecimiento ilícito.
DELITOS PATRIMONIALES|| DERECHO || Johan MVoff
DELITOS CONTRA EL PATRIMONIO
Para Finalizar
La Ley penaliza los delitos contra el patrimonio, que son aquellos cometidos contra la propiedad de una persona o contra un bien mueble o inmueble. Entre estos delitos, se encuentran el robo, el hurto, el daño a la propiedad, el fraude y la estafa.
El Código Penal español contempla una serie de delitos contra el patrimonio, entre los que se encuentran el robo, el hurto, el daño a la propiedad, el fraude y la estafa.
El robo es un delito que consiste en la aprehensión de una cosa mueble ajena, con ánimo de lucro y contra la voluntad de su dueño. Se considera robo, tanto si la cosa es aprehendida con violencia como si se hace sin ella.
El hurto es un delito que consiste en la aprehensión de una cosa mueble ajena, con ánimo de lucro y sin contravenir la voluntad de su dueño. El hurto se diferencia del robo en que no se requiere de violencia para apoderarse de la cosa, sino que basta con el ánimo de lucro.
Lee También Certificado De últimas Voluntades.El daño a la propiedad consiste en la realización de actos que causen perjuicios a la propiedad de otra persona. Se trata de un delito que puede cometerse de diversas maneras, como, por ejemplo, derribando un muro o destrozando un objeto.
El fraude es un delito consistente en el engaño a otra persona, con el fin de obtener un beneficio para sí mismo o para terceros. El fraude puede cometerse mediante diversos medios, como la utilización de documentos falsos o la inducción a error.
La estafa es un delito consistente en el engaño a otra persona, con el fin de obtener un beneficio para sí mismo o para terceros. La estafa se diferencia del fraude en que se requiere que la víctima entregue algo de valor al estafador.
Los delitos contra el patrimonio son considerados delitos graves, y su cometido puede suponer la imposición de una pena de prisión.
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